Las mejores milanesas de la Ciudad llegaron gratis a los hospitales: una caricia de sabor para médicos y enfermeros
El bodegón El Antojo lo hizo de forma solidaria para ayudar en la lucha contra el covid 19.
En agosto de 2017, El Antojo, un bodegón ubicado en la calle Tinogasta 3174, corazón de Villa del Parque, ganó el concurso de "Mejor Milanesa de Bodegón de la Ciudad". La bendición de los premios: desde entonces, duplicó su producción y casi triplicó la cantidad de empleados. Pasó de los 11 con los que se manejaba a los 28 que tiene hoy, más los 3 que sumó en las últimas semanas para el turno mediodía de delivery.
El Antojo
Previo a la cuarentena obligatoria estaban haciendo 8000 cubiertos mensuales. Seducidos por la etiqueta que representa ese premio, habían saltado del anonimato a las guías de la ciudad, y viajeros y curiosos aparecían para pedir mesa y cumplir con el ritual de comer la mejor milanesa. Hoy trabajan, coronavirus mediante, entre 60 y 70 pedidos diarios bajo el formato delivery. No sin esfuerzo: el paisaje se volvió desolador para los gastronómicos a partir de pandemia y mantener a la plantilla de empleados es sin dudas un desafío. Pero lo están logrando.
El Antojo
Este domingo se celebró un nuevo Día de la Milanesa y para celebrarlo, Christian Franco y Maria Eugenia Peña, los dueños del boliche, este año quisieron devolver un poco de la buena fortuna que han tenido en los últimos años y homenajear a quienes están al frente de la lucha contra el Coronavirus: médicos y enfermeras de la Ciudad. Por eso, durante el fin de semana donaron y acercaron personalmente 300 sandwiches de milanesa y 300 bebidas para todo el personal del Hospital Muñiz. El sábado 2 los recibió en el primer envío el Jefe de Guardia de ese día, el doctor Julio Calcagno.
El Antojo
Están felices de colaborar. Casi sin haberlo imaginado, como también ocurrió en Europa, son parte del engranaje que hace posible que ahí, en el frente de batalla contra el coronavirus, en los tiempos de descanso, entre urgencias y tratamientos, los profesionales de la salud se relajan con una sabrosa milanesa.