jueves, 15 de febrero de 2018

La Nación - Economía - Una panadería que creció lejos de Palermo

Una panadería que creció lejos de Palermo

Paul Petrelli
"Le blé", para un estudiante principiante del idioma francés, es "el trigo", pero para un entendido del lunfardo de la lengua se traduce como "la guita". Así se llama también la cadena de locales gastronómicos que en los últimos años instaló 22 sucursales en la ciudad de Buenos Aires y en la zona norte del Gran Buenos Aires.
Le Blé, como su nombre, es una mezcla de sofisticación extranjera con informalidad de barrio que nació en 2008. Paul Petrelli (54) es el emprendedor que, junto a su mujer, Donatienne Fievet (47), de origen belga, inició el negocio, que implicó una inversión inicial de US$150.000.
Con la idea de apostar por los barrios, lejos de la escena chic de Palermo, abrió sus puertas por primera vez en la esquina de Álvarez Thomas y Céspedes, un rincón de la ciudad olvidado en ese momento. La fecha tampoco era muy tentadora: fue en septiembre de 2008, el mismo mes en el que el banco norteamericano Lehman Brothers se declaró en bancarrota y desató una crisis financiera internacional.
No hay que tener miedo a animarse, pero emprender no es para todos. Hay grandísimos ejecutivos que ganan fortunas y son buenísimos, pero si los sacás de ese contexto hacen agua
En Le Blé hoy trabajan 40 personas de forma directa y, a través de sus franquiciados, hay un total de 300 empleados. Entre todas las franquicias venden 270 millones de pesos anuales.

1 - Animarse a pegar el salto

"Trabajé toda mi vida en aviación, mi familia también vino de la aeronáutica", dijo Petrelli, quien llegó a ser director comercial en LAN Cargo durante su experiencia anterior. Salir de la protección de la corporación y resignar el cargo en la línea aérea y un estándar de vida cómodo no fue fácil, "psiquiatra de por medio", definió.
Arrancar un emprendimiento propio a los 43 años tenía satisfacción y orgullo, pero implicaba unos cuantos ajustes con respecto a su puesto anterior dentro de una gran empresa. "Venía de un ambiente en el que manejaba millones de dólares a uno donde mil pesos eran importantes. De tener asistentes, secretarias y backoffice de finanzas a ir solo al banco, hacer la cola en la AFIP y otras tareas sin apoyo", comentó, y recordó: "Mis ex compañeros de LAN me decían que estaba loco en ponerme a hacer croissants. Me mandaban mails que decían: '¿Qué hacés croissant?'", recordó.
Aunque se encuentra satisfecho con el cambio de rumbo, no lo recomienda para cualquiera. "No hay que tener miedo a animarse, pero emprender no es para todos. Hay grandísimos ejecutivos que ganan fortunas y son buenísimos, pero si los sacás de ese contexto hacen agua", remarcó.

2 - Apostar por el barrio

"Location, location, location" es un principio fundamental y repetido tanto para el mundo de los inmuebles como para el de la gastronomía, y en Buenos Aires se traduce como "Palermo". "Álvarez Thomas y Céspedes no era un lugar para nada tentador en 2008, pero yo tenía la idea fija de que en los barrios iba a funcionar muy bien por la combinación de volumen de gente y falta de lugares lindos para sentarse a comer o tomar un café", rememoró Petrelli, y dijo que en esas primeras épocas la gente esperaba afuera, el "sueño del pibe" de cualquier gastronómico. "Tenía sobrevendido el local y ese boom a la larga iba a funcionar mal. Es una idea que aprendí de la aviación: cuando instalás una frecuencia nueva y es un éxito de entrada es que hay una demanda insatisfecha enorme", explicó.
Por esta razón, decidió abrir un segundo local en Avenida Dorrego y Vera nueve meses después, a diecisiete cuadras de la primera ubicación. En la esquina competía con un puestito de choripán precario y de la mano de enfrente al Le Blé había un edificio tomado. "Quiero devolverle el barrio la panadería y el café gallego en un ambiente no muy pretencioso", dijo el emprendedor sobre cuál fue su deseo inicial. Más adelante llegaron las primeras franquicias: cuatro en Almagro, dos en Caballito, una en Boedo (San Juan y Mármol), una en Belgrano (Virrey Arredondo y Vuelta de Obligado) y otra en Devoto. "Todos lugares donde estimábamos que el barrio iba a valorar la propuesta, nada de Palermo Soho ni Hollywood", remarcó.

3 - Trabajar para el largo plazo

Con la idea de seguir abriendo locales, Petrelli tomó una decisión centrada en el futuro a largo plazo de su negocio. El siguiente paso fue abrir un centro de producción en agosto de 2011, aunque al momento solo tenía que abastecer dos locales. "Era una Ferrari que andaba a 20 kilómetros por hora", resumió. Por desajustes financieros, hubo un momento en el que, para sanar los saldos, el emprendedor volvió a trabajar en el rubro de la aeronáutica como consultor. Viajaba todas las semanas a Miami para generar el ingreso necesario para su familia y mantener el negocio a flote. Contrató una gerenta general, Isabel de Elizalde, para profesionalizar la gestión, y durante un tiempo mantuvo la doble vida necesaria. En una de sus visitas a Buenos Aires, mientras jugaba un partido de rugby, se cortó el tendón de Aquiles, por lo que tuvo que permanecer en cama para rehabilitarse de la operación. Volvió a enfocar toda su energía en Le Blé .

4 - Pilotear en tiempos de vacas flacas

"Emprendedores psicológicos hay millones, pero no tanta gente puede poner en marcha una idea y sostenerla", explicó Petrelli. En la Argentina el desafío es aún mayor: "En abril del año pasado la manteca estaba a 30 pesos el kilo y hoy cuesta 120. Nosotros compramos 800 kilos de manteca por semana y no se puede trasladar el aumento ni cambiar por margarina ni grasa, porque los clientes sacan una tarjeta roja al toque", describió.
Para subsistir, según el emprendedor, lo más importante es tener una estricta disciplina. "Quise vender todo treinta veces y pensaba: 'No aguanto más tropezar y tener que volver a levantarme'. Este país te exige una gimnasia que de aquí podés emprender en cualquier lado", concluyó. Hace mucho hincapié en su entrenamiento deportivo (jugó al rugby toda la vida) y su despertador, comentó, está fijo en las cinco de la mañana todos los días. "El panadero es el primero que se levanta", resumió.

Mini bio

  • Experiencia anterior: Vivió 23 años fuera de la Argentina mientras trabajaba en el sector aeronáutico
  • Inversión inicial: Comenzó el proyecto de Le Blé en 2008, con una inversión de US$150.000
  • Estrategia: Posicionarse en barrios, lejos del circuito de cafeterías y restaurantes de moda, con una alternativa moderna
  • Actualidad: Entre locales propios y franquicias cuenta con 22 sucursales y en 2017 facturó $270 millones
  • Expansión: En un futuro apuesto por tener presencia en el interior del país y reforzar la zona norte de Buenos Aires
  • Link a la nota: https://www.lanacion.com.ar/2108142-le-ble-una-panaderia-que-crecio-lejos-de-palermo

Planeta Joy - Comer - Las arepas copan la ciudad (y recomendamos cuatro lugares para probarlas)

Las arepas copan la ciudad (y recomendamos cuatro lugares para probarlas)

La gastronomía local vive un boom venezolano, y no nos referimos a la cantidad de camareros con tonada caribeña, sino a su plato insignia: las arepas. En esta nota, todo sobre el nuevo manjar que deleita a los foodies.
El mapa gastronómico de Buenos Aires se tiñe con los colores venezolanos para darle la bienvenida a las arepas, el plato insignia de Venezuela. 
A las brasas o a la plancha, gruesas o más bien finitas, rellenas o no, hay muchísimas variantes para probar y te recomendamos cuatro lugares donde hacerlo. 
Caracas Bar
“El venezolano siempre viene con una arepa bajo el brazo”, dice, sentado a la barra de Caracas Bar, Félix Ovalles, uno de los responsables del lugar. Ahí, donde alguna vez estuvo Mundo Bizarro, hace ocho años Félix tomó la posta con la comida cotidiana de Venezuela y cocktails en los que, por supuesto, no falta el ron. 
Un bar con música del caribe que permite hablar sin necesidad de gritar, luz tenue y una carta que apunta a las arepas (hechas con harina cruda de maíz) y otras especialidades venezolanas para picotear.
Finas, tostadas y crocantes, hay once variedades de arepas para probar. Están las tradicionales, como la de carne mechada -con corte de tapa de asado o vacío- bien tiernas ($120), o la de pollo desmenuzado con palta y mayonesa, que acá en Caracas Bar y cualquier otro lugar se la conoce como Reina pepiada ($120). 
Pero también se puede pedir la arepa de pernil de cerdo ($120), con una cocción de entre seis y ocho horas, o las veggie, como la Veggie dominó, con porotos negros y queso blanco ($120). El Negron, un trago variante del clásico Negroni, con ron e infusión de canela y naranja ($150) o, en su defecto, un Guarapita -con ron y ananá- más dulce y menos fuerte, son buenos acompañantes de la comida. 
Otra media docena de cocktails caribeños, más allá de los clásicos, también cumplen su cometido, con el ron como ingrediente omnipresente,
La idea, explican, no es llenar al comensal con una sola arepa, así que una sugerencia es pedirle a los camareros una tabla de arepas para picar y, por qué no, sumar algunos tequeños (bocaditos de masa hojaldrada rellenos de queso) que son la segunda comida más deliciosa de Caracas Bar. 
Guatemala 4802, Palermo.
T. 4776-8704

Guaica Bar
Durante la semana, Guaica es la alternativa rápida y saludable de decenas de oficinistas que escapan de los menúes repetidos que suelen ofrecerse por el microcentro. 
Los fines de semana, en cambio, es un punto de parada de venezolanos, colombianos y personas de distintos países que se acercan a probar una extensa variedad de arepas preparadas por su chef, Javier León. 
En un local ubicado en el subsuelo de la galería Jardín, la propuesta pasa por desconectar un rato: en una pantalla hay videos de naturaleza, música ambiental y hasta preparan un refrescante té frío de Hibiscus, también conocido como flor de Jamaica. 
 
Javier de León explica que las arepas son un mix de Harina P.A.N. (la marca venezolana de harina de maíz precocida) y maíz natural, que primero se hacen a la plancha y luego, antes de ser servidas, adquieren su crocante con un toque de horno. El resultado es una arepa ancha y redonda y, luego, bien rellena. Una es la de asado negro, hecha con cuadrada de ternera  a la cerveza ($125). Otra corresponde al emblema de Venezuela: la arepa Pabellón ($160), muy abundante, con porotos negros, carne mechada, plátano, queso y palta: un verdadero tanque de la gastronomía venezolana. Se les puede agregar una salsa tártara casera o una salsa picante de esas que realmente prenden fuego la boca, ambas opciones están siempre sobre la mesa. 
También hay otras arepas, más raras, como la de ceviche de palmitos o la de huevos revueltos, llamada Perico ($125). “Lo que nos late, o nos da corazón, lo tiramos a la venta”, dice de León, siempre en busca de nuevos sabores. 
Un dato a tener en cuenta es que Guaica es un buen lugar para tomar rones venezolanos que, por las políticas internas del país productor, no son fáciles de conseguir en el extranjero. 
Florida 537, Microcentro.
T. 4328-1872

Panachef
La plancha con la que comenzó a hacer arepas el chef David Flores luce colgada en una de las paredes de su local. Después de pasar por Osaka, Paru y el Hotel Intercontinental, septiembre de 2014 fue el mes en el que este cocinero venezolano decidió hacer su propio camino. Panachef, sin embargo, empezó con hamburguesas y otros sándwiches. Fueron los clientes del lugar quienes empujaron a Flores a incluir las arepas.
La pizarra de Panachef exhibe seis variedades de arepas, todas ellas grandes y crocantes. Están las tradicionales, aquellas que no pueden faltar para un venezolano, como la de pollo, palta, verdeo y queso un poco derretido ($180), o la de carne mechada con queso amarillo ($140). Pero también hay menos comunes: la Americana, que imita el desayuno estadounidense y se rellena con panceta, huevo y queso ($140). La arepa de la casa, la Panachef, supera ampliamente el tamaño de una boca y, como si se tratara de una hamburguesa, hay que tomarla con ambas manos. Queso en abundancia, tomate en rodajas, y cerdo cortado en cubos son sus ingredientes ($140). 
Para agregarle a las arepas hay una mayonesa de ajo exquisita, y barbacoa. No faltan, claro está, los tequeños y otras preparaciones de la cocina venezolana, como las cachapas, una especie de panqueque hecho de choclo. 
Sánchez de Bustamante 1470, Recoleta.
T. 4961-3782

Miss Venezuela
“Nada gourmet”. Así describe Yesire Carrillo, dueña de Miss Venezuela, lo que aparece en un menú en donde, según cuenta, están las recetas de arepas tal como se pueden encontrar en las calles de su país, sin giros sofisticados: la arepa tal como se come desde siempre en Venezuela. 
Las arepas son caseras, hechas con Harina P.A.N. y, lo más importante, son sabrosas. El lugar es pequeño y la decoración no es pretenciosa: mesas altas con banquetas, algunas fotos de lugares del mundo en las paredes y cocina a la vista. 
 
Como en el nombre del restaurante, el “Miss” encabeza cada variedad de arepa: Miss perico, es la de revuelto de huevos, cebollas, tomates y queso ($95) y la clásica Miss Reina Pepiada ($100) se sirve de manera tradicional: arepa caliente, y el relleno de pollo desmechado, palta y mayonesa, todo frío, como si se tratara de una ensalada. Una buena opción es la Venezuela, que se puede armar a gusto de cada comensal con hasta cuatro ingredientes  ($110).  Además, hay otras diez arepas distintas e, incluso, se puede comprar la Viuda ($25), que es, ni más ni menos, que la arepa sin relleno. 
Los tequeños son la otra parte que se distingue del menú, porque además de los de queso, también hay de queso y jamón y… ¡de chocolate! En los próximos días, Miss Venezuela abre su primera franquicia, en Paternal, así que habrá que estar atentos. 
Bonpland 1509, Palermo.
T. 4776-3087

Por Nicolás de la Barrera.
Link a la nota: https://www.planetajoy.com/?Las_arepas_copan_la_ciudad_%28y_recomendamos_cuatro_lugares_para_probarlas%29&page=ampliada&id=10090

Clarín - Sociedad - ¿Cuánto mide el salame más largo del mundo que se presentó en Tandil?

¿Cuánto mide el salame más largo del mundo que se presentó en Tandil?

Fue elaborado por un grupo de 80 personas, en un proceso que llevó 20 horas. Mirá las fotos.
¿Cuánto mide el salame más largo del mundo que se presentó en Tandil?
Se presentó en Tandil el salame más largo del mundo.
El salame más largo del mundo se presentó en el Anfiteatro Martín Fierro de Tandil, en el marco del 35° Festival de la Sierra, según informó la Secretaría de Turismo local.
La pieza, de 53,4 metros de longitud fue medida por el cocinero Juan Braceli ante unas 10.000 personas.
¿Cuánto mide el salame más largo del mundo que se presentó en Tandil?
Se presentó en Tandil el salame más largo del mundo. Fue medido por el cocinero Juan Bracelo.
El titular de ese organismo, Alejandro Bonadeo, señaló a la agencia Télam que "este logro es especial para el Consejo del Salame de Tandil, porque superamos la marca más alta anterior, que era de la ciudad santafesina de Oncativio y que medía 45,5 metros".
La producción de este salame gigante requirió el trabajo de 80 personas durante 20 horas para procesar carnes y tocinos.
El producto final pesó alrededor de 160 kilos.
¿Cuánto mide el salame más largo del mundo que se presentó en Tandil?
Se presentó en Tandil el salame más largo del mundo.
Entre los festejos por este nuevo logro, Juana Echezarreta, presidente del Consejo de la Denominación de Origen Salame de Tandil, comentó: “Es un orgullo para los productores y para la gente haber batido esta marca, es el reflejo de los esfuerzos que realizaron nuestros antepasados cuando comenzaron a adaptar sus recetas a las condiciones de esta región. Es el espíritu de una comunidad que busca el progreso, sin perder sus raíces”.​
El salame, que es de estilo criollo con particularidades de especies y denominación de origen, se compartió con los vecinos y turistas que llegaron a Tandil para pasar el feriado largo de Carnaval.
Una parte también fue subastada a beneficio del Banco de Alimentos de Tandil.
¿Cuánto mide el salame más largo del mundo que se presentó en Tandil?
Se presentó en Tandil el salame más largo del mundo.
¿Cuánto mide el salame más largo del mundo que se presentó en Tandil?
El salame más largo del mundo, por las calles de Tandil.
El Salame de Tandil cuenta con la primera Denominación de Origen del país para un alimento agroindustrial. Obtenida en 2011 –después de 15 años de estudios de factibilidad- la D.O. busca proteger un producto histórico de la región. El clima, las pasturas y el ganado de la zona son claves para la obtención de su sabor distintivo.
En otro orden, el secretario de Turismo precisó que "las 10 mil plazas hoteleras de la ciudad estuvieron con más del 95% de ocupación este fin de semana largo".
El funcionario dijo que "el movimiento turístico fue intenso por el feriado de Carnaval y eso movilizará con fuerza la economía de toda la región serrana".
Link a la nota: https://www.clarin.com/sociedad/mide-salame-largo-mundo-presento-tandil_0_H13KG7AUM.html

La Nación - Lifestyle - Abre un museo de golosinas que hace realidad el sueño de Willy Wonka

Abre un museo de golosinas que hace realidad el sueño de Willy Wonka

Facebook: Sugar Factory
Fanáticos de la golosina, corran a Nueva York en un par de meses. La cadena de restaurantes Sugar Factory anunció que abrirá el primer museo de dulces del mundo en un espacio de casi tres mil metros cuadrados.
La idea surgió dado que muchos clientes de los restaurantes suelen posar en distintos rincones de los pintorescos locales. Sea en las paredes cubiertas de donas de colores como en las entradas con patitos de hule tamaño humano. Así es que prometen una experiencia superadora en la apertura.
Por ahora solo se sabe que tendrá 15 espacios experimentales, cada uno correspondiente a un tipo de golosina. Uno para los caramelos, otro para los chupetines y tal vez hasta el pochoclo será protagonista. Se podrá aprender sobre la historia de cada dulce y también ver cómo se fabrican.
El punto más instagrameable quizás sea una gomita gigante en forma de oso que atraerá toda la atención. Al contrario del Museo del Helado que estuvo abierto solo una temporada, este será una atracción fija para cualquiera que visite la gran ciudad.
Link a la nota: https://www.lanacion.com.ar/2109142-abre-un-museo-de-golosinas-que-hace-realidad-el-sueno-de-willy-wonka

Planeta Joy - Comer - The Brick Kitchen renueva su carta

The Brick Kitchen renueva su carta

El chef Javier Marrone preparó una nueva carta que se centra en la alta gastronomía de verano; con una excelente relación precio calidad, te contamos cuáles son los highlights de la propuesta.
La estacionalidad es eje de la buena gastronomia, por eso The Brick Kitchen, el restaurant de The Brick Hotel Buenos Aires, permanece fiel a esa premisa.
En esta temporada de verano, su chef, Javier Marrone renovó el menú. La parte dulce, como siempre, contó con el asesoramiento de la reconocida Beatriz Chomnalez.
Entre las entradas se destacan las Mollejas doradas al oporto, con emulsión de zanahorias, cardamomo, col fermentado, cítricos y aceite de perejil ($190) y los langostinos, vieyras y calameretis al sartén, con paltas, tapioca de cítricos, emulsión de maracuyá y mango ($180).
A la hora de los principales, vale la pena probar el Risotto nero di seppia, langostinos y pulpo ($290) y el muslo de pato pekín en confit, cake de maíz, lechuga capucchina, cebollas baby quemadas, chutney de mango y membrillo ($310).
Además, a la hora del almuerzo y de la cena, todos los días se puede disfrutar del “Menú de Javier”, el mismo incluye 1 bebida sin alcohol y una copa de vino sugerencia del sommelier más un café. La opción de dos pasos cuesta $490 y la de tres $550.
Más información:
Almuerzo: 12.30 a 15.30
Cena: 19.30 a 00
Reservas: 4819-1246/04
Posadas 1232

Link a la nota: https://www.planetajoy.com/?The_Brick_Kitchen_renueva_su_carta&page=ampliada&id=10092