miércoles, 3 de agosto de 2016

Revista Brando - Los jueces de la cerveza

Los jueces de la cerveza

Cada dos años se elige la mejor cerveza del mundo en alguna ciudad de Estados Unidos y en la última edición, 11 argentinos oficiaron de jueces. ¿Cómo se posicionan nuestros cerveceros en el exterior? 
Por Nicolás Harry Salvarrey 

Filadelfia, cuna de la independencia de Estados Unidos y hogar de Benjamin Franklin y Rocky Balboa, está transformada. No pasa seguido que una ciudad sea invadida por 13.000 cerveceros de todo el mundo, sus bares desbordados de idiomas y sus calles anegadas de extraños turistas que prefieren, mucho más que sacarse una foto con la Campana de la Libertad, entrar en un pub y probar una nueva variedad de cerveza local. Sucede que cada dos años, distintas ciudades estadounidenses albergan la World Beer Cup (WBC) -la Copa Mundial de la Cerveza- y en 2016 el honor le tocó a la ciudad más importante del estado de Pensilvania. Se trata, como su nombre lo indica, de un certamen en el que se eligen las mejores cervezas del mundo. 
En el certamen de este año se juzgaron más de 6.700 muestras inscriptas en 92 categorías que van desde estilos clásicos como la Pilsen hasta cervezas ácidas añejadas en barrica, pasando por las que incluyen hierbas, centeno o chile. Fueron 263 los jueces que calificaron las muestras en hojas de cata, que luego les son enviadas de manera anónima a los fabricantes para que puedan a su vez nutrirse de las opiniones de especialistas y mejorar sus productos. La gran mayoría de los jueces pertenece a países de tradición en la bebida: Estados Unidos, Inglaterra, Bélgica, Alemania. Por fuera de estos, los dos países con más representantes son Brasil, con 13, y Argentina, con sus orgullosos 11 catadores. El número es significativo, especialmente teniendo en cuenta que hasta hace poco encontrar un latino en la WBC era más difícil que ganarle a Alemania en un Mundial. 
Toda historia tiene un pionero. "Cuando fui por primera vez en 2008 no había argentinos", cuenta Leo Ferrari, de Cervecería Antares. "Los jueces eran principalmente estadounidenses, ingleses y alemanes". Con el correr de las ediciones, nuestro país fue abriéndose camino y demostrando que sus especialistas estaban al nivel de las competencias internacionales. En paralelo al exponencial crecimiento del mercado de la cerveza artesanal local, Argentina fue aportando más y más jueces a la WBC. 
ARGENTINOS AL MUNDO
Además de los jueces, en los pasillos del inmenso Centro de Convenciones de Filadelfia es fácil encontrarse con otros compatriotas "dueños de cervecerías, pubs, o simplemente curiosos, perdidos entre ollas y barriles, explicándoles a los grandes del mundo cervecero que el país de Messi no es solo carne, tango y buenos vinos. Se dice, también, que en las fiestas que patrocina la Brewers Association, son los primeros en llegar y los últimos en irse, hablan de sus cervezas como un padre habla de su hijo recién nacido y sonríen frente a una pregunta que se repite: "¿Otro argentino más? ¿Qué está pasando con la cerveza en tu país que son tantos?". 
La cantidad de argentinos involucrados en la WBC no es más que otra muestra del estado de la escena cervecera en el país. "Tener un grupo de jueces acá es un reconocimiento al colectivo. Te pone en el mapa", dice Ricardo "Semilla" Aftyka, de las cervecerías Juguetes Perdidos y Los Bichos Mandan. 
Hoy, Estados Unidos es la meca de la cerveza artesanal. Los productores locales tienen acceso a los mejores insumos y equipos, tienen una comunidad pujante, tienen un alto grado de experimentación y tienen un mercado que no para de crecer. Pero los argentinos no se achican. "En lo que respecta a calidad no estamos tan lejos -dice Hernán Castellani de Cervecería Sir Hopper y el más joven de los jueces-. En Argentina hay cada vez más conocimiento y capacitación, aunque estamos atrasados en la parte tecnológica: todo es hecho por nosotros, construido por alguien que más o menos se da un poquito de maña". Semilla refuerza la idea: "Cuando estuve hace dos años, las birras que tomaba me parecían inalcanzables para cualquier cervecería argentina. Hoy los jueces tuvimos la misma sensación con las cervezas que probamos: ¿La verdad? No estamos lejos de esto". 
PRESENCIA NACIONAL

El juez con más experiencia en la WBC es Leo Ferrari, fundador de Antares. Su primera vez fue en 2008, hace cinco ediciones. Con el correr de los años se le fueron sumando Martín Boan, Carolina Pérez y Diego Collini (especialistas del Centro de Cata de Cerveza), Ricardo "Semilla" Aftyka (cervecerías Juguetes Perdidos y Los Bichos Mandan), Ricardo Muhape (homebrewer, ex head brewery de Buller), Diego "Van der Saar" Castro (homebrewer de larga tradición), Gabriel Reynoso (La Paloma), Lucas Lico (Grunge), Emilio Ghirardi (La Cruz) y Hernán Castellani (Sir Hopper). Las cervezas artesanales argentinas que participaron de la WBC son Antares, Berlina, Juguetes Perdidos, Los Bichos Mandan y Nihilista. También se presentaron las industriales Patagonia y Quilmes.
Link a la nota: http://www.conexionbrando.com/1923808-los-jueces-de-la-cerveza

La Nación - Sociedad - Por qué se celebra el Día del Trabajador Gastronómico

Por qué se celebra el Día del Trabajador Gastronómico

Un día como hoy, pero en 1948, se agrupaban los gremios hoteleros y gastronómicos
MARTES 02 DE AGOSTO DE 2016 • 07:28

El día del gastronómico hace referencia a la historia gremial de los trabajadores
El día del gastronómico hace referencia a la historia gremial de los trabajadores. Foto: LA NACION / Graciela Calabrese
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Como cada 2 de agosto desde 1948, hoy se celebra el Día del Trabajador Gastronómico. Ese día, se constituyó la Federación Obrera Argentina de la Industria hotelera (FOAIH), lo que significó que se agruparon todos los gremios de las ramas hoteleras y gastronómicas constituidas en todo el territorio nacional a lo largo de más de 40 años.
Para festejar este día, en varias provincias se suele realizar una comida elaborada para compartir, como por ejemplo un locro, y además, una competencia entre mozos para premiar al que tiene mejor equilibrio para llevar las bandeja durante una carrera.
Con idas y venidas, intervenciones del gobierno y cambios de nombre, la vocación gremial de los trabajadores hoteleros y gastronómicos argentinos lleva más de 95 años de vida.

La historia de la unión

Hacia el año 1904 los trabajadores hoteleros y gastronómicos comenzaron a sindicalizarse en distintas zonas del país por rama de actividad, dando lugar a sindicatos de cocineros, mozos, mucamas, barmans, o por ejemplo, de cocineros, mozos y afines, cuando el gremio agrupaba a varias ramas.
A partir del año 1944, comienza a gestarse un nuevo proceso por el cual, los sindicatos que se habían creado en cada especialidad perteneciente a una misma región, se fueron agrupando para dar así origen a asociaciones de trabajadores de mayor envergadura y con un ámbito geográfico de actuación más amplio.
Con fecha 2 de agosto de 1948 se constituye la Federación Obrera Argentina de la Industria Hotelera (Foaih), que obtiene, a través de la Resolución Nº 49/49 de la Secretaría de Trabajo y Previsión de la Nación, la personería gremial que lleva el nº110.
Esta Federación agrupa a todos los gremios de las ramas hotelera y gastronómica que se habían constituido en todo el territorio nacional a lo largo de más de 40 años.
Posteriormente, el 25 de agosto de 1955, la Foaih modifica su naturaleza jurídica, transformándose en un único sindicato denominado Unión de Trabajadores Gastronómicos de la República Argentina (Utgra), cuyos estatutos son aprobados por Resolución Nº 160/55 del Ministerio de Trabajo y Previsión de la Nación, manteniendo la personería gremial Nº 110 que le fuera otorgada de la Foaih.
Con el advenimiento de la Revolución Militar del año 1955, la Utgra pierde su personería gremial. Recién le es restituida por Resolución Nº 13/66 del Ministerio de Trabajo y Previsión de la Nación el 14 de Enero de 1966.
En ese mismo año se produce la llamada Revolución Argentina, cuyo gobierno ejerce una permanente presión sobre la Organización, al bloquear las cuentas bancarias del Gremio.
En 1977 el Gremio es nuevamente intervenido, esta vez por el gobierno de facto.
Esta situación se extiende hasta el 23 de octubre de 1985, oportunidad en que el Ministerio de Trabajo y Seguridad Social de la Nación, luego de una larga lucha mantenida por los trabajadores para recuperar su Gremio, convoca a elecciones. Mediante el voto democrático la Utgra vuelve a ser dirigida por sus legítimas autoridades
A fines de 1999 vuelve a modificarse el nombre, para pasar a llamarse Unión de Trabajadores Hoteleros y Gastronómicos de la República Argentina (Utgra), manteniendo su personería gremial.
En 2004, a raíz del crecimiento exponencial de la actividad turística, es estatuto pasa a llamarse Unión de Trabajadores del Turismo Hoteleros y Gastronómicos de la República Argentina.
Link a la nota: http://www.lanacion.com.ar/1923975-por-que-se-celebra-el-dia-del-trabajador-gastronomico

La Nación - Buenos Aires - El puchero del Plaza: causa furor y habilitan más días para disfrutarlo

El puchero del Plaza: causa furor y habilitan más días para disfrutarlo

Ante el anuncio del cierre del hotel por tres años, trepó la demanda por probar el plato español; se servía los domingos de mayo a septiembre y ahora se sumarán los sábados; queda poca disponibilidad
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PARA LA NACION
MIÉRCOLES 03 DE AGOSTO DE 2016

Diferentes carnes y verduras, preparadas con un riguroso método, atraen a los comensales en el Grill
Diferentes carnes y verduras, preparadas con un riguroso método, atraen a los comensales en el Grill. Foto: Diego Spivacow / AFV
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En el barrio de Retiro, el Plaza Hotel ofrece desde hace más de 40 años uno de los pucheros más clásicos de la ciudad. La visita al emblemático edificio, construido en 1909 por el arquitecto alemán Alfred Zucke por pedido del empresario Alberto Tornquist, constituye un programa en sí mismo. Y si se le suma la posibilidad de disfrutar un característico plato español, la experiencia es por demás disfrutable.
Tradicionalmente, al menos desde los 90, los domingos entre mayo y septiembre eran los días elegidos por el Grill del Plaza para servir el puchero. Pero desde el próximo fin de semana se sumarán también los sábados: la demanda creció ante el anuncio de que, en marzo venidero, el hotel cerrará sus puertas durante tres años para someterse a una refacción integral, con el objetivo de volver a lucir la fachada que originalmente tuvo. Nadie quiere perderse ahora una oportunidad que no se repetirá hasta 2020.
Tras la reciente adquisición del grupo Sutton, el lujoso hotel situado frente a la plaza San Martín se apresta a una reforma que abarcará también salones y habitaciones.
Hasta la tercera semana de septiembre, sábados y domingos al mediodía serán los días de puchero. El furor por este famoso plato provocó que sólo queden muy pocas reservas disponibles hasta el fin de la temporada, con cerca de 80 cubiertos por servicio.
Mariano y Ethel Martínez confiesan ser habitués, de manera casi adictiva, desde hace más de 10 años. "Venimos por lo menos tres veces por invierno. Como acá no lo preparan en ningún lado", dijeron mientras el maître los recibía como amigos de la casa.
La visita puede comenzar con un recorrido histórico por el hotel, que incluye sus nueve salones, armoniosamente unidos, pasando por habitaciones emblemáticas, sus restaurantes y la tan afamada cocina, en la que cerca de 40 personas trabajan por turnos con profesionalismo y dedicación.
El tour finaliza en el Grill, donde tiene lugar el afamado ágape. El espacio mantiene la estructura y la ambientación originales: elegantes mesas y sillas con mantelería blanca, originales platos Villeroy & Boche exhibidos en vitrinas, mullidas alfombras, cubiertos de plata y hasta originales ventiladores paquistaníes forman parte de la decoración.

Oferta variadísima

Cinco ollas y otros tantos rechauds o calentadores se disponen estratégicamente ubicados en medio del salón para que cada comensal se acerque y elija qué servirse entre la variadísima oferta de carnes y acompañamientos. Asado de tira, falda, vacío, rabo, codillo de cerdo y gallina se presentan en ollas de hierro, cada corte hervido por separado. En los rechauds hay caracú, chorizo criollo, colorado y morcilla, panceta, cuerito de chancho, carré de cerdo y lengua. También, papas, batatas, calabazas, choclos, zanahorias, arroz, porotos, espinaca y repollo.
Acomodados en una mesa, Edgar y Sofía, que llegaron de vacaciones desde Perú, se maravillaron con el despliegue del almuerzo. "Nos recomendaron el lugar y nos gustó tanto que ya es la segunda visita. Comemos muy bien por un precio acorde, además de hacerlo en un lugar de esta categoría", explicó Edgar.
Antes de adentrarse en el plato fuerte, unas sabrosísimas empanadas de carne cortada a cuchillo resultan el puntapié ideal. Todo es preparado in situ, durante cuatro laboriosas jornadas. Más de 50 kilos de carne y 10 kilos de cada tubérculo son necesarios para cada mediodía. Donato Mazzeo, con 40 años en el hotel y chef ejecutivo del Plaza, es el celoso responsable de esa titánica cocina. Aún recuerda cuando a los ocho años acompañaba a su padre a desempeñar allí también sus tareas, en una tradición que aún mantiene. "Yo me crié acá. Fui a trabajar un tiempo al exterior e incluso tuve mis locales, pero volví. Como esta cocina no hay", comentó.
Relató que el afamado puchero no tiene demasiados secretos, aunque hay ciertos pasos que es necesario respetar para asegurar que los sabores no se superpongan. Primero se hierven las verduras y luego en ese caldo se sumerge cada corte por separado, de manera de no alterar los tiempos de cocción. Todo está perfectamente calculado.
En el salón, el servicio responde eficientemente a las órdenes de Ángel Barrera, que lleva también sus cuatro décadas trabajando en el hotel. Ningún empleado registra menos de 10 años de antigüedad, detalle que se percibe con placer y agradecimiento. Fanática del puchero, Verónica Irusta acude cada año con sus hijas. "Además de que es exquisito, el entorno es increíble, en un hotel soñado como éste", explicó, mientras Violeta y Anabella saludaban a los mozos por su nombre.
Una vez saciado por demás el apetito, una increíble mesa dulce ofrece delicias que remiten a sabores de la infancia. Huevos quimbos, ambrosía, arroz con leche, yema quemada, queso y dulce, variedad de pastelitos, flan, gateau Alvear, alfajorcitos rogel y diversas frutas en almíbar resultan el cierre ideal, acompañados por el infaltable café.
Frecuentado por diversas figuras de la política y el espectáculo locales, el Plaza también es visitado los domingos de puchero por visitantes de otros países y provincias, atraídos por la fama y el buen nombre, pero también por las ganas de comer bien, con sabor casero. El clásico Grill dirá "hasta pronto" dentro de poco. Mientras tanto, es furor.

Otros lugares recomendados

El Globo
Hipólito Yrigoyen 1198
Cangas de Narcea
Beruti y Godoy Cruz
El Imparcial
Hipólito Yrigoyen 1201
La Cátedra
Cerviño y Sinclair
La Estrella
Tapiales 1136, Vte. López
Link a la nota: http://www.lanacion.com.ar/1924218-el-puchero-del-plaza-causa-furor-y-habilitan-mas-dias-para-disfrutarlo

La Nación - Televisión - Siete ciclos de cocina para saborear desde casa

Siete ciclos de cocina para saborear desde casa

Desde reality shows a documentales, los chefs se adueñaron de la pantalla chica
LA NACION
MARTES 02 DE AGOSTO DE 2016 • 10:10

Chef''s Table
Chef''s Table.
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Con la etiqueta del lifestyle, que es una manera más elegante de hablar de contenidos aspiracionales, casi no hay género televisivo que la cocina no haya conquistado. Reality shows, documentales, ciclos de entrevistas y de competencia para todas las edades, es tan variada la oferta de los programas con la cocina en el centro que conviene repasar los mejores, destacar los imperdibles y alertar sobre esas pequeñas delicias que el gourmet de sillón nunca probó y definitivamente no se puede perder.
Gordon Ramsay, siempre presente en Masterchef
Gordon Ramsay, siempre presente en Masterchef.
Masterchef US. Cuando un formato de reality show es inteligente, está bien editado y cuenta con un buen casting no hay forma de romperlo. Eso es lo que prueban cada una de las versiones que se hicieron -y se siguen haciendo-, de Masterchef. Efectivo, entretenido y repetitivo en la mejor sentido, uno ya sabe qué esperar cuando lo ve y el programa lo otorga en cada emisión, más que en el carisma de los participantes, el ciclo se apoya en la presencia de sus jueces y conductores. En el caso de la versión norteamericana, además de la indispensable presencia del irascible Gordon Ramsay y la simpatía de Graham Elliot, en la nueva temporada se sumará la pastelera Christina Tosi. Los fanáticos extrañarán al circunspecto Joe Bastianich pero ya verán lo que la nueva jueza aporta al programa. (Hoy, a las 22, por Discovery Home & Health).
El conductor de Chopped y dos participantes del ciclo
El conductor de Chopped y dos participantes del ciclo.
Chopped. Para algunos nada es más entretenido que ver a amateurs intentando convertirse en profesionales de la cocina, pero no se compara con ver a chefs profesionales compitiendo entre sí frente a las cámaras. Pocas cosas más satisfactorias en este género que ver a un creído cocinero alardear sobre su talento para verlo luego tropezar con las tareas más básicas de su profesión. Esa es básicamente la premisa deChopped, el ciclo conducido por Ted Allen (los reality gourmands lo recordarán como el experto en cocina del prehistórico Queer Eye for the Straight Guy) en el que cuatro chefs compiten entre sí, contra el tiempo y los ingredientes que solo conocen segundos antes de ponerse a cocinar. Se lo juzgará por el sabor, la creatividad y cómo integraron esos caramelos de goma a su entrada salada. (domingos a las 21, por Food Network).
Me voy a comer el mundo. Pocas combinaciones funcionan mejor en el universo lifestyle que la mezcla de ciclo de viajes y cocina. Las locaciones exóticas y los coloridos nativos pueden inspirar recorridos entre filosóficos y periodísticos como los que hace Anthony Bourdain o ciclos menos profundos como Bizarre Foods con Andy Zimmern o Andy Bates Brazilian Street Feats. Entre ellos, la novedad de la semana es Me voy a comer el mundo. Allí, la periodista española Verónica Zumalacárregui recorre Tokio, Dubai, Moscú, Río de Janeiro, Nueva Delhi y Nápoles, entre otras ciudades, probando sus platos más reconocidos, las recetas más sofisticadas y también los sabores que se cocinan en las casas de sus habitantes. (Desde hoy, martes y jueves a las 22, por ElGourmet). La travesía comienza esta noche por Tokio, Japón.
Bake Off Reino Unido. El aire se corta con un cuchillo. Con una clase muy específica de cuchillo. Cuando los concursantes esperan que los jueces Mary Berry, famosa escritora culinaria y Paul Hollywood, repostero profesional, se acerquen a su mesa los nervios se transmiten con la contundencia del mejor film de suspenso. aunque aquí el misterio a descubrir sea quienes de los 12 concursantes habrá hecho la mejor torta del programa. Aunque usted no lo crea, Bake Off Reino Unido, no solo es un ciclo premiado que ya lleva seis temporadas en la BBC sino que es uno de sus programas más vistos del canal y se le adjudica haber revivido el interés por la pastelería de la población británica. Y el entusiasmo por los panificados se extendió a los más de diez países que hicieron su propia versión del formato. Que tuvo tanto éxito que transformó a su peculiar dúo de jueces en celebridades instantáneas y a muchos de los ganadores cocineros amateurs profesionales. Que todo el asunto, una competencia de tortas, masitas y panes, transcurra en una gigantesca carpa en medio de la campiña inglesa agrega encanto a un ciclo que lo tiene por todos sus dulces lados. (Hoy a las 21, por Discovery Home & Health).
The Best Thing I Ever Ate. Recorrer ciudades que no conocemos, probar sabores que nunca probamos antes. Y tal vez nunca degustaremos pero no importa. Uno de los costados más rendidores y extendidos de la TV culinaria es la recomendación del experto. Ya no se trata de ver cocinar a los profesionales o de verlos juzgarse entre ellos si no que en ciclos como The Best Thing l Ever Ate lo importante es la pasión. Nunca lo aspiracional se pareció más a la fantasía que cuando un cocinero norteamericano recomienda los mejores platos de un pequeño local de su ciudad natal en medio del Estados Unidos profundo. Por supuesto que allí preparan el mejor pastel de cangrejo que hayamos probado nunca. Especialmente porque nunca lo probaremos. (Viernes a las 20.30, por Food Network).
El brasileño Alex Atala en Chef''s Table
El brasileño Alex Atala en Chef''s Table.
Chef's Table. En la enorme oferta de contenido que ofrece Netflix a sus suscriptores los documentales son una pata fundamental. Claro que empeñada en dominar el mercado audiovisual de consumo hogareño la plataforma de streaming optó por empezar a producir sus propios ciclos y lo que le resultó en la ficción volvió a funcionar de maravillas del lado del documental gastronómico Chef's Table. El programa que en septiembre estrenará su tercera temporada que esta vez estará enteramente dedicada a la cocina francesa tiene alcance global-en la primera temporada uno de los episodios estuvo dedicado a Francis Mallman- y no se queda sólo con la capacidad creativa de sus protagonistas si no que también los retrata de manera personal. Sus platos son tratados como obras de arte y su vida como el material de esa novela que siempre quisiste leer y nadie se había atrevido a escribir. Una maravilla que cualquier entusiasta de la cocina debería ver y probablemente alguien que la detesta también ¿De qué otro modo podría uno conocer los increíbles rincones de Brasil que muestra con orgullo Alex Atala, dueño y alma pater de D.O.M., uno de los mejores restaurantes del mundo? ¿O ser testigo de la historia de caída y redención de Grant Achatz, el excéntrico y genial chef de Chicago que un mal día perdió el paladar? (Disponible en Netflix).
Iron Chef America. Una versión del exitoso ciclo japonés que dio origen al fenómeno, este programa de concurso se toma a la cocina muy en serio en un contexto que se hace cargo de lo ridículo que puede ser el nivel de intensidad al que llegan este tipo de competencias. Dos chefs profesionales con todos los reconocimientos posibles se enfrentan en una batalla definida por el ingrediente secreto que el presidente (el actor y artista marcial Mark Dacascos) les presenta de manera dramática. Todo transcurre en un escenario al que llaman estadio cocina y que cuenta con reporteros apostados sobre el campo de juego que van describiendo los diferentes platos que realiza el chef junto a sus colaboradores. La música, el diseño de luces y la seriedad de los participantes empeñados en conseguir el título de Iron Chef le guiñan el ojo al espectador que desde su casa jura que puede sentir el aroma y saborear el gusto del plato ganador. (jueves a las 22, por Food Network).
Link a la nota: http://www.lanacion.com.ar/1923780-siete-ciclos-de-cocina-para-saborear-desde-casa

Clarín - Sociedad - Cocinar con marihuana: un chef lidera la "gastronomía cannábica"

Cocinar con marihuana: un chef lidera la “gastronomía cannábica”

En Los Angeles
Christopher Sayegh tiene 24 años y desde hace dos sirve exclusivos menús de al menos 300 dólares en base al cannabis.

A sus 24 años, Christopher Sayegh dio con el ingrediente mágico para condimentar sus recetas. Desde hace dos años, este chef californiano sirve menús elaborados con cannabis.
Mientras cada vez más estados estadounidenses miran con buenos ojos la legalización la marihuana recreativa, este atípico cocinero, que pasó por restaurantes con estrellas Michelin en Nueva York y California, se propuso mezclar alta cocina y marihuana. “Trato de ofrecer a la gente una experiencia intelectual --explica Sayegh desde su empresa The Herbal Chef, con sede en Los Angeles--. Pero también soy muy cuidadoso en cómo los llevo por este viaje”. 
Sayegh incursionó en el mundo del cannabis comestible cuando muchos emprendedores buscan capitalizar la nueva fiebre de la marihuana en California, que en noviembre votará sobre la despenalización de su uso recreativo para mayores de 21 años. Otros cinco estados, incluyendo Alaska, Colorado y Washington, ya aprobaron una legislación similar, y es de esperar que otros sigan esta tendencia, porque el movimiento cuenta cada vez con más apoyo en la opinión pública.


En Estados Unidos, la marihuana medicinal está permitida en al menos 23 estados, entre ellos California. Y ese número debería seguir aumentando, aunque la producción de cannabis sigue siendo ilegal a nivel federal. En Argentina, la legalización para fines terapéuticos está en pleno debate, y el presidente Mauricio Macri no descartó que se apruebe.


De acuerdo con un informe del ArcView Group, una firma de inversión y de investigación especializada en el cannabis, la venta legal de marihuana en Estados Unidos generó ingresos por 1.200 millones de dólares en 2015, un incremento del 232% en un año. En 2020, se prevé que las ventas superen los 22.000 millones de dólares, de los cuales 6.400 millones se facturarán sólo en California.


Estas proyecciones son suficientes para hacer agua la boca a los empresarios. Como Sayegh, muchos quieren incursionar en este floreciente negocio. Para el chef, este sueño culinario data de la universidad. Allí estudió inicialmente biología molecular, carrera que después abandonó para seguir con su verdadero proyecto. Su perseverancia dio frutos. En 2014 creó su empresa de alta cocina canábica en Los Angeles y desde entonces, asegura, la actividad de The Herbal Chef no para de crecer.


Por ahora, Sayegh solo puede servir sus platos a quienes porten la tarjeta que autoriza el uso de marihuana médica. Pero espera superar este escollo en noviembre, si California vota a favor de la marihuana recreativa.


Mientras tanto, sus costosos menús, que oscilan entre 300 y 500 dólares por persona, son elaborados exclusivamente para hacer que el cliente viva una experiencia de 100% “inmersión”. “Yo cambio literalmente la química del cerebro a medida que la gente degusta mi comida”, dice entusiasmado mientras manipula jeringas que contienen la sustancia activa del cannabis, que luego incorpora a sus comidas. “Al final del tercer plato se siente un poco, en el cuarto un poco más y el final del quinto es la culminación del viaje. Es como una sinfonía. Tengo que asegurarme de que los platos se ajusten a la subida, y viceversa para el descenso”.


Sayegh propone una cocina sofisticada a base de carne de wagyu japonés, sorbete de pomelo u ostras “medicinales”. nfluenciado por sus orígenes jordanos, incorporó también el cannabis en hojas de parra, en bolas de garbanzo (falafel) y otras versiones de platos de Medio Oriente.


Su familia, al principio consternada por su nuevo emprendimiento, hoy disfruta al probar sus últimas creaciones. Sin embargo, aun cuando la incorporación de cannabis en los alimentos está en pleno auge en el país, Sayegh prefiere ser prudente. Los consumidores de este nuevo género de alimentos no deben tomar a la ligera la experiencia.
“No es una ciencia exacta en muchos sentidos, ya que muchos factores entran en juego cuando se cocina con cannabis --analiza Robyn Griggs Lawrence, autor de “The Cannabis Kitchen Cookbook--. Esto no es como pedir un vaso de whisky. Estamos apenas en la etapa de descubrimiento todavía”.
El jefe de The Herbal Chef sabe perfectamente el impacto que pueden tener sus platos y se esmera preparando cuidadosamente cada uno de ellos. “El cannabis no es como los otros ingredientes. Hay que ser extremadamente cuidadoso no sólo porque el calor juega un papel muy importante en la cocción sino también porque, literalmente, lleva a la gente a un viaje y tenés la responsabilidad de que sea bueno. No se trata de tirar manteca en una sartén para dejar a todo el mundo súper colocado”, advierte.
Link a la nota: http://www.clarin.com/sociedad/Cocinar-marihuana-invento-gastronomia-canabica_0_1624637562.html