La Nación - Vinos - Ice para el verano

Ice para el verano

Se trata de espumosos que ofrecen un poco menos de gas, perfectos para tomar con hielo como un buen cóctel

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Joaquín Hidalgo

LA NACION

DOMINGO 04 DE DICIEMBRE DE 2016

Gentileza Chandon.

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Las burbujas nacionales e importadas están en ebullición de la mano de un nuevo producto. Se los conoce como ice y en pocas palabras se trata de espumosos con un balance entre semiseco y dulce a secas, que ofrecen un poco menos de gas, perfectos para tomar con hielo como un buen cóctel.

El primero en descorchar la tendencia en esta parte del mundo, allá por 2012, fue Chandon Délice ($ 190) -del que ahora descubrimos el secreto sufijo en clave-, cuya propuesta fue beberlo en vaso de boca ancha, con dos o tres rocas de hielo y, para gloria del verano, una rodaja de pepino o unas hojas de albahaca. Claro que no tardó en tener partenaires: Norton Cosecha Tardía ($ 130) se lanzó al hielo y la frescura, lo mismo que Navarro Correas Dulcet ($ 160) o el infalible Deseado ($ 165) y otros espumosos que buscaron en el mixeo una forma más terracera de consumo.

Lujos de afuera

Pero ahora llegan a la góndola algunos de los importados. Ice en todo su esplendor, que proponen botellas cubiertas con un vinilo de color para vestir la botella y llamar la atención. Los dos casos emblemáticos son Pommery Royal Blue Sky ($ 2700) yFreixenet Ice ($ 390), un champagne y un cava en toda ley.

Para que nos pongamos de acuerdo: espumosos dulces, incluso muy dulces, existieron desde que el champagne vio la luz; la cosa va por el mixeo y nuevas situaciones de consumo para las burbujas. Para más datos, ya forman una categoría especial, los ice, que puede costar una buena cantidad de pesos.

En cualquier caso, hay dos reglas básicas para observar a la hora de servirlos. Una, el hielo: si se hizo con agua de la canilla, se estropearán los aromas y dejará un sabor acre; hay que hacerlos o bien comprarlos con agua mineral o sin cloro. Dos, que los ingredientes usados sean buenos y simples: al pepino y albahaca mencionados, sumamos menta fresca, hierbabuena, piel de limón o limas (con sus respectivas gotas, mejor aún), y la mayor de las herejías posibles, una lámina delgada de melón, primo hermano de la sandía. Con la receta a mano, ahora nada más resta tener la pileta llena, el mar al alcance de la vista o la terraza iluminada con foquitos y guirnaldas, para esperar que el verano se anticipe en la copa.

Link a la nota: http://www.lanacion.com.ar/1962134-ice-para-el-verano