El pan nuestro en la mesa de cada día
El país es gran consumidor de este alimento; hay una panadería cada 1100 habitantes
72 kilos
Consumo per cápita de pan
El pan, mezcla de harina, agua, levadura y sal nacida hace más de 4000 años en el antiguo Egipto, se convirtió prácticamente en sinónimo de comida. Este alimento, del cual se han desarrollado miles de variantes en el mundo entero, tiene en la Argentina un consumo per cápita anual de 72 kilos, algo que coloca al país entre los de mayor consumo a nivel mundial.
Según datos aportados por la propia industria, el top ten de los países con mayor consumo per cápita está integrado así: Turquía (132 kilos por habitante al año), Alemania (106), Bulgaria (96), Chile (86), Argentina (72), Uruguay (62), Grecia (60), Francia (57), Bolivia (35) y México (35).
La actividad industrial en la cadena del pan se inicia con las operaciones concernientes a la molienda del trigo. Históricamente, la provincia de Buenos Aires concentra 50% de la molienda anual de trigo para pan. Esto guarda relación con la proximidad de la materia prima a los molinos harineros. En segundo lugar está Córdoba, con 24% de la molienda anual. Y, tercero, Entre Ríos, con 13%.
Según datos de la Secretaría de Agroindustria de la Nación, en el país se producen unos 3,05 millones de toneladas anuales de productos panificados, de los que 94% corresponden al pan tradicional de panadería y 6%, al pan industrial. "Se calcula que en la Argentina existe una panadería tradicional cada 1100/1200 habitantes", se indica en la página web de esa repartición.
El consumo de pan comenzó a disminuir en el mundo a mediados del siglo XIX, y así fue cómo desde 1880 descendió 70%. Pese a que la introducción de los denominados "panes integrales" cobró fuerza debido a los beneficios de la fibra que contienen, no son pocos los consumidores que paulatinamente han retornado al pan elaborado con harinas poco refinadas.