viernes, 19 de mayo de 2017

Télam - Turismo - Gastronomía, turismo y producción se combinaron en el encuentro Del Territorio al Plato

Gastronomía, turismo y producción se combinaron en el encuentro Del Territorio al Plato

Este evento gastronómico busca estimular a pequeños y medianos productores, fortalecimiento de economías locales y promoción de alimentos regionales.
Con comidas elaboradas con productos autóctonos del Noreste Argentino (NEA), como yacaré, mandioca, carpincho, chipa, pacú, reviro, mango y mamón, el encuentro "Del Territorio al Plato" expuso la gastronomía de esa región, un corredor al que el ministro de Turismo, Gustavo Santos, consideró "estratégico" para la actividad turística.

Los sabores del NEA fueron anoche protagonistas de la cena en la sede central del Automóvil Club Argentino en la Ciudad de Buenos Aires, de la mano de los cocineros regionales Alejandro Delpino, de Formosa; Ariel Leguiza, de Corrientes; Carlos Losch, de Chaco, e Iván Ortega, de Misiones.

Santos dijo a la audiencia que "este corredor de naturaleza que empieza en Misiones, baja al Iberá (Corrientes), pasa a Chaco, con su Impenetrable, y llega a Formosa, donde está el Bañado La Estrella, el tercero de Sudamérica, fue el primer corredor que definimos como estratégico".

"Este corredor, en el que más esperanzas pongo, lo hemos interpretado con la gastronomía, su cocina", añadió el ministro, y resaltó que "antes sólo se sabía de ellos por los chicos desnutridos de pueblos originarios, pero ahora pueden integrarse en un producto en el que sólo tienen que ser ellos mismos, pueblos originarios, que son muy valorados por su cultura y producción".

Del Territorio Al Plato 2017

Del Territorio al Plato es una iniciativa organizada por el Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria (INTA) y la Fundación Argeninta, que valoriza y promociona alimentos y cocina de las regiones del país para contribuir con la producción y el turismo locales.

Su primera edición, hace un año, estuvo dedicada al Noroeste Argentino, ahora le tocó al NEA, y fuentes de Argeninta anunciaron a Télam que el próximo turno será Cuyo, luego la Patagonia y finalmente la región centro del país.

Para un numeroso grupo de comensales, integrado por chefs, productores, empresarios, técnicos, funcionarios y prensa especializada, se sirvieron preparaciones autóctonas como bocaditos de yacaré sobre chip de mandioca crocante, reviro con huevo de codorniz, chipa, escabeche de carpincho y empanadas de cordero mesopotámico con maní, en el aperitivo.


Estos bocados fueron acompañados por tragos como gin tonic con té misionero, gin de yerba mate y jugo de naranja, agua mineral con rodajas de cítricos del NEA y un vino blend reserva del INTA, que luego también regó la cena.

La entrada de la cena fue una variante de sopa paraguaya: torta de maíz y queso con mix de verdes y emulsión de arándanos, a lo que siguió, como plato principal, un chupín de pescados: surubí y pacú, con mandioca frita.

El postre fue una combinación de helado de mango con banana flambeada, madera comestible y panal de miel (sobre este último, uno de sus autores recomendó "masticarlo como chicle"), acompañado por un vino espumante blanco, también producido por el INTA.
Tras la cena llegó una infusión denominada "cocido quemado", que por contener yerba y azúcar, a muchos les recordó simplemente al tradicional mate cocido.

También hubo café,y como la infusión anterior fue acompañado por alfajorcitos de almidón de mandioca, pepas de dulce de mamón y de naranja y bocaditos de algarroba, mascabo y maracuyá.

El chef Delpino, quien llevó para la cena el pacú y unos panales de miel desde Formosa, dijo a Télam que estaba muy contento "por conocer colegas de la región y que entre todos le estemos dando un nombre, una identidad, a nuestra cocina". 

"Nuestra idea es ayudar a los productores para que puedan mejorar y satisfacer nuestras necesidades", explicó el cocinero y dueño de La Cantina del Sarmiento, un pequeño restaurante que funciona en el club que le da el nombre, en la capital formoseña.

Delpino contó que sus platos son en base a surubí y pacú, el primero del río y el segundo de "una piscifactoría sustentable, que tiene un piletón en el que dos años siembran arroz y dos años vive el pacú, que come los caracoles y larvas que quedan en el fondo".

"El surubí es el pescado que más sale, aunque el de Formosa es más flaco que el de Corrientes y de Chaco, porque sube contracorriente por el río Paraguay para reproducirse, y su carne en lugar de ser amarilla es rosa, con mucho menos tenor graso y de sabor más delicado", aseguró.


Por último, comentó: "tenemos mucha influencia de la gastronomía paraguaya, a la que llamamos gastronomía guaraní, con la que esperamos unirnos al resto de la gastronomía argentina".

Losch, de Chaco, quien participó de la elaboración del chupín de pescado, afirmó que "es como llevar la gastronomía nuestra a las bases; hacer lo que hacían los primeros pobladores de la zona, con la pesca diaria".

"La nobleza del chupín que preparamos es que fue hecho con productos de la huerta y productos del río, con zanahorias, cebollas y pimientos, poco condimentos, y se cocina dentro de su jugo; todo muy natural", explicó a Télam este cocinero dueño del restorán Almacén Gourmet, de Resistencia.

Sobre éstos y los otros chefs presentes, a los postres el ministro Santos afirmó: "Estos chicos son como dioses que transforman los elementos en otras cosas, deliciosas, cuando pasan por sus manos".

Conexión Brando - Comer+Beber - Todo lo que dejó la Feria Masticar


Todo lo que dejó la Feria Masticar

La feria de cocina y alimentos más importantes del país, organizada por la A.C.E.L.G.A., tuvo su sexta edición. Allí estuvimos para contarlo 
La feria de cocina y alimentos más importantes del país, organizada por la A.C.E.L.G.A., tuvo su sexta edición. Allí estuvimos para contarlo
  • Fiesta de sabores en la nueva edición de la Feria Masticar

Por Alejandro Maglione 
amaglione@lanacion.com.ar 
Cuando se mira el camino recorrido desde el año 2012 hasta hoy, lo que queda claro es que se puede mejorar. La última edición de MASTICAR fue realmente impresionante. Con una ampliación enorme de la superficie, se podría haber pensado antes de abrir las puertas que iba a faltar gente para llenar tanto espacio: craso error. Cada metro cuadrado añadido fue muy bien ocupado por novedosas propuestas y por gente dispuesta a probarlas. 
Resultó imposible recorrerla adecuadamente en un solo día, tal su tamaño. Sobran las descripciones sobre los mejores lugares o aquel puesto del mercado que no se podía dejar de visitar. Prefiero no redundar en esa información pero sí señalar un dato: los puestos en que se expusieron y vendieron los más variados productos superaron los 100. Un centenar de puestos en los que todo lo que se ofreció fue de excelente calidad, variedad y precios extraordinarios. La exhibición volvió para reabrir el debate sobre el alto costo de traer ciertos alimentos a las grandes ciudades. 
Es para destacar que este año se haya incorporado un Taller de Oficios que permitió a muchos conocer la trama para poder recorrer el camino inverso al producto final. Así, fue interesante recorrer el camino del chocolate hacia el grano de cacao, conocer las virtudes del vino para el organismo humano gracias a una eminencia como el doctor Roberto Iermoli, o poder escuchar al ascendente Juani Gerardi explicar su proyecto Bioconexión, en el que el mundo de la gastronomía toma contacto con el de los productores. 
Muy interesante para el gran público, también, fue que alguien explicara el proceso en base al cual se produce la cerveza artesanal. O que el carnicero Ariel Argomariz revelara los secretos para hacer el jamón casero, llegando a señalar las diferencias con el jamón industrial. 
En comparación con ediciones anteriores hay que saludar y festejar la creciente presencia de las bodegas argentinas que poblaron el Bar de Vinos. Este lugar contó con sommeliers que asesoraban al público sobre las características de los vinos que se ofrecían, guiando a los interesados en la apreciación de las diferentes cepas. 
Visita en sábado a la tarde. Si bien no es el mejor de los motivos, no pocos visitan la feria para ver en vivo y en directo a sus adoradas estrellas de la TV gastronómica. Ese día se vieron a figuras relevantes como Roberto Petersen, haciendo el aguante en el puesto familiar; o Gabriel Oggero en su Crizia, acercándose a la cola de los aspirantes a probar sus ostras para permitir que se hicieran una selfie con él. Se sabe que Pedro Picciau morirá en el timón de Italpast, y volvió a dar el presente. Y la lista sigue. En cambio, en muchos otros locales de famosos se notó que el cansancio de estar en la ferua les había exigido un paréntesis durante el tercer día. 
La feria de cocina y alimentos más importantes del país, organizada por la A.C.E.L.G.A., tuvo su sexta edición. Allí estuvimos para contarlo
  • La calidad, la variedad y los precios económicos fueron una constante de la Feria

Volvió a ser gratificante el espectáculo de tanta gente joven interesada por la gastronomía, expuesta de las más diversas maneras. Esa misma gente joven necesitaría debería saberlo: no es correcto reservar con bolsos el 40% de las sillas desocupadas. El problema de encontrar un lugar para sentarse a degustar con tranquilidad el plato elegido con la bebida sobre la mesa -y no todo en la mano haciendo malabarismos- es desagradable. Con certeza, un tema para imaginar para el próximo armado. Esas mesas redondas, altas, sin asiento, que permiten comer de pie, puede ser una de las soluciones. Y obviamente, carteles que digan "las sillas no se reservan, retire objetos personales para permitir que puedan ser utilizadas por otros". 
La feria de cocina y alimentos más importantes del país, organizada por la A.C.E.L.G.A., tuvo su sexta edición. Allí estuvimos para contarlo
  • Del productor a la mesa. Quién y cómo se producen los alimentos

Quejas I. Bastante gente se quejó porque estacionar se volvió una aventura digna de titanes. Hay que explicarles que en muchas ferias del mundo pasa lo mismo. Salvo predios feriales construidos al efecto, en general acceder a una movida de este volumen con el vehículo propio suele ser complicada. 
Quejas II. El año pasado se hizo escuchar la queja de los padres de los niños alumnos de una escuela cuyo polideportivo fuera utilizada por la feria. Este año se reemplazó por el que facilitó la UCA, realmente más confortable. 
Quejas III. Hubo problemas para entrar el primer día en el horario reservado a los periodistas. Se rumoreaba que el problema se dio con un área del Gobierno de la Ciudad. Una curiosidad, porque ya habían pasado todas las inspecciones, para un evento del que el propio Gobierno también era auspiciante y tenía 4 puestos en su interior. Es de suponer que se trató de una de esas internas que de tanto en tanto salen a la luz. Los organizadores desistieron prudentemente de comentar el asunto. Pero las fotos llegaron a las redes. 
Conclusión. Si fuera del caso puntuar a esta Masticar, creo que se merece un 9/10. El punto a descontar corresponde al tema de los asientos desocupados con desubicados bolsos reservadores. Un deseo es que haya más de una feria por año. Alguien murmuró: "es la de otoño, hay que esperar la de primavera".Ojalá. 
Miscelánea tapera. Los días 15, 16 y 17 de junio próximo se celebrará en todo el mundo el Día de la Tapa. Para esto la Embajada de España en nuestro país está convocando a un selecto listado de restaurantes para que participen del mismo. La tarea es sencilla para los que participen: ofrecer a sus clientes una tapa y una copa de vino por un valor de $100. Al mismo tiempo, un calificado jurado seleccionará la mejor tapa, lo que significará para los participantes el ganar dos pasajes a España con estadía en cualquiera de los lugares donde se encuentre un hotel de la cadena Meliá. 

Planeta Joy - Beber - Una noche en Uptown, cocktails y Nueva York como escenario

Una noche en Uptown, cocktails y Nueva York como escenario

Después de bajar una escalera, pasar un andén y cruzar un verdadero vagón de subte, Planeta Joy llegó a la barra cuya apertura fue la más esperada del año. En la nota, te contamos de qué se trata.

Sin descanso, el muchacho de pelo revuelto, bigote grueso y barba tupida, va y viene detrás de la barra. En cuestión de segundos, agarra y deja una botella de ron, un almíbar de ananá, jugo de limón, de lima y un licor de hierbas, una y otra vez.  Su espacio de trabajo es de apenas unos metros, pero lo hace a un ritmo sin pausa. Acaba de servir un cocktail y ante un pedido que llega, él consulta: “¿me dejás que le explique el trago a ellos?”. Se trata de Luis Miranda que acaba de terminar una de sus creaciones y, ahora, en medio del frenesí, le cuenta a una pareja qué les sirvió. Los movimientos repentinos de Luis no tardan en comenzar nuevamente. De aquí para allá, además, va a entregar cartas de tragos, lavar cocteleras, poner en orden sus herramientas, responder preguntas y hacer sugerencias. “Nadie quiere que el lugar sea ni parezca un boliche, entonces estamos haciendo lo posible para prestarle a cada cliente la atención que se merece”, dirá más tarde. El lugar en donde Luis Miranda despliega todo lo que sabe hacer en coctelería es Uptown, una de las aperturas más esperadas y anunciadas de este año.

Uptown & The Bronx invita a jugar en su concepto: una recreación del subte de Nueva York, que obliga al visitante a bajar por escaleras a una estación de subterráneo, llegar a un andén y atravesar un vagón antes de ingresar al bar (aclaración: cuando se dice que hay que ingresar a un vagón no es una exageración, sino que es porque de verdad hay una formación de subte con puertas automáticas, cabina de conductor y butacas). Finalmente se llega al espacio en donde los cocktails y la comida son las figuras: allí están las mesas para grupos de amigos o parejas y la barra iluminada, como estrella al fondo del salón. Columnas, graffitis en las paredes, techo alto: la ambientación remite a estar bajo un puente. “Cuando llegamos, esto era piso de tierra, escombros y agua de napa. No había nada. Lo hicimos todo desde cero”, cuenta Pablo Fernández, uno de los responsables junto a Andrés Rolando del nuevo spot.



Es temprano en el bar, apenas pasadas las 21.30, y ya hay más de cien personas que ocupan todas las mesas, mientras otros se agolpan frente a la barra. “¿Es de parado el tema acá?”, le pregunta un chico a una chica que lo acompaña. Un espacio amplio sirve para quienes no hicieron la reserva y ahora están a la espera de algo para tomar de pie. Hay algunas banquetas sueltas, pero claramente no alcanzan para todos. Tras pasar el subte, algunas personas que llegan al espacio del bar preguntan por las mesas: no parece que se fueran a desocupar fácilmente. “No les podemos prometer nada”, dicen en la recepción. Aseguran que tienen reservado todo por los próximos 20 días.

En un lateral, hay vidrieras que muestran un local de tatuajes y una farmacia. Se puede entrar al último y encontrar en antiguos estantes, frascos que remiten a viejos medicamentos.

La música suena a un volumen medio. Un poco de hip hop, algo de pop y temas más bien tranquilos son los que ambientan la noche que recién empieza. De a poco, el clima se va armando. Entre cocktails, hay grupitos de chicas a pura selfie, chicos en búsquedas amorosas, parejas que experimentan con algún cocktail desconocido y algunas personas habitúes del mundillo de la coctelería, en especial de Harrison. Las  cabezas detrás de ese speakeasy son los mismos que los de Uptown, así que no es extraño que el público del primero (también de onda neoyorkina) se dé una vuelta por el recientemente inaugurado.



En la barra, Luis, Chula Barmaid y tres bartender más no paran de sacar tragos. La carta, como todo lo que puede encontrarse acá, tiene su brújula que apunta a la Gran Manzana: ahí están la sección de Central Park, con cocktails herbáceos, florales y más refrescantes; Brooklyn Bridge, con los clásicos y sus reversiones; Rockefeller, con bebidas premium; Times Square, con tragos para compartir y Soho, el capítulo destinado a la experimentación. En esta sección, hay cocktails con reducción de frutos rojos, hielo de mango picante y el Vip rosé que lleva Carolina Herrera 212 VIP Rosé, Absolut, Chandon Rosé, cordial de Sandía y jugo de limón. El jefe de barra, como todo lo que hace, lo tiene casi listo en tiempo récord. Sin embargo, aun falta el perfume. “Luis, ¿de verdad lleva perfume?”. Pero Luis no contesta: hace un gesto para ser seguido con la mirada, toma el frasco de perfume y aprieta para que un ligero rocío caiga sobre el vaso.



Claro que no todo pasa por los tragos de vanguardia. “¿Qué pedimos, una caipi?”, “¿Me hacés un whiscola?”, “Te pido una cerveza”. “Chula, ¿me ponés un poquito más?”. Chula Barmaid, anteojos de marco negro, pelo oscuro con algún aire al de Robert Smith y camisa colorida, no le niega al cliente un poco más de whisky. Aunque luego aclara que esto no es algo habitual y estamos seguros que ya conocía a ese cliente.

Cada bartender en su trago, todo parece perfectamente coordinado, a pesar de que Uptown abrió hace apenas unas semanas. “Soy media fanática de las aperturas, porque en las primeras semanas no sabés con qué estés lidiando y la cantidad de gente es alevosa”, dice Chula, que ya cuenta con diez inauguraciones en su carrera. “Al principio fue medio como un desborde, pero anoche brindamos porque el servicio ya tomó forma”, añade.

La música sube en su volumen y tiene mayor protagonismo. Desde una torre reciclada en una vieja cabina de una máquina de esas que trabajan en los puertos, un DJ tomó las riendas del asunto. Para hablar, puede que haya que levantar un poco la voz, mientras suena un pop actual. En el espacio entre la barra y las mesas, hay algunos que ya se animan a moverse un poco.



De la cocina, salen pastas, ribs, hamburguesas y sushi,  todo en buenas porciones. Pablo Fernández define el estilo gastronómico del lugar como “comida callejera étnica gourmet”. “La idea era armar una especie de comida que se pueda comer en un bar, pero no tener que caer en nachos con queso, papas fritas, tapas, sino armar algo de calidad”, agrega. Dante Liporace ideó la carta, que está dividida en seis estaciones de subte, y cuatro integrantes de la cocina del extinguido Tarquino se encargan de los platos.



En el vagón del subte, un grupos de amigas se sacan fotos, se cuelgan de los pasamanos y otras se sientan ahí y charlan. Otros, que recién llegan al bar, lo inspeccionan de una punta a la otra. También están quienes se sacan fotos con algunos tragos, mientras Bruno Sarda Lerotic (23) opina: “En gastronomía, creo que es 90% organización y 10% concepto, y este lugar tiene las dos cosas.” Y agrega que los bartenders conforman algo así como aquel equipo del Real Madrid conocido Los Galácticos.

Después de la medianoche, el bar se transforma y roza lo bailable, no se baila pero la atmósfera está. Afuera hay fila para entrar. La gente espera para bajar a un subte que abre de noche y se mueve con la cadencia de los buenos cocktails.

Arévalo 2030, Palermo.
Por N.B. 

Clarín - Entremujeres - Huauzontle, un manjar prehispánico que te encantará

Huauzontle, un manjar prehispánico que te encantará

Conoce las propiedades de esta planta comestible. Te decimos cómo preparar tortitas capeadas, un exquisito platillo heredado de esta dieta básica prehispánica.  
Huauzontle, un manjar prehispánico que te encantará
Comer huauzontles en cualquiera de sus presentaciones es casi como participar en un ritual a la mesa. Es uno de esos platillos en lo que se vale meter las manos, porque lo importante de esta planta nutritiva es quitar con los dientes las semillas de las baritas que no se comen. Junto con el maíz, el huauzontle es uno de los alimentos más importantes que México ha aportado al mundo. ¿Te animas a probarlo?
Su nombre viene del náhuatl huautzontli, de los vocablos huautli (bledo) y tzontli (cabello). Es considerado un pseudocereal y pertenece a la familia del amaranto y la quinoa, con la ventaja sobre esta última de que se produce en México por agricultores mexicanos y es más barato y fácil de conseguir. La mejor época del año para consumirlo es entre julio y octubre, pues florece de forma natural en esa temporada. Por si fuera poco, contiene muchísimas propiedades.

Atole vegano: de soya y sabor a guayaba


Comestible 100%
¿Sabías que en la época del emperador Moctezuma el huauzontle era, junto con el amaranto, el cuarto cultivo en importancia, después del maíz, el frijol y la chía? Al igual que el cacao y el jitomate, el huauzontle es una planta comestible nativa de México que forma parte de la dieta básica prehispánica. Se pueden comer tanto sus hojas y sus flores como sus raíces y semillas. Como platillo, es más común encontrarlo en los estados de México, Tlaxcala, Guerrero, Morelos y en la Ciudad de México.

5 sencillos pasos para preparar un pozole vegetariano


9 propiedades saludables
  1. Tiene antioxidantes que ayudan a combatir los radicales libres.
  2. Contribuye a disminuir los niveles de colesterol en la sangre.
  3. Tiene vitaminas E, A y C, además de que es alto en complejo B.
  4. Es rico en calcio, hierro y fósforo.
  5. Ayuda a reducir el estrés.
  6. Es benéfico para el cerebro y la memoria.
  7. Mejora las funciones digestivas.
  8. Es una excelente opción de cereal para celíacos o personas alérgicas al gluten.
  9. Contiene saponinas, una sustancia que estimula el sistema inmunológico y mejora los mecanismos de defensa del cuerpo.
Su preparación es versátil. Se puede consumir en sopas, ensaladas y guisados, aunque lo más común es hallarlo en tortitas capeadas combinadas con leguminosas como frijoles, lentejas o habas, juntos forman una proteína bastante nutritiva. Por eso, te compartimos esta deliciosa receta.

Maridaje de cerveza con queso, una pareja perfecta


Ingredientes (para 4 personas)
  • 1 kilo de huauzontles
  • ½ kilo de queso de hebra
  • Harina de trigo
  • 5 huevos (ocuparás las claras de todos y dos yemas)
  • Aceite de maíz para freír
  • Sal al gusto
Para la salsa
  • ¼ de cebolla
  • 2 jitomates
  • 1 diente de ajo
  • 6 chiles guajillo
  • Sal al gusto

Café o té, ¿en verdad son bebidas tan diferentes?


Preparación 
  • Lava muy bien los huauzontles, corta los tallos gruesos y el resto, las baritas pequeñas, ponlas a cocer durante 10 minutos con agua y sal al gusto, tápalas hasta que estén suaves.
  • Sácalas, enjuágalas con agua fría y comienza a deshojar de modo que queden sólo las florecitas pequeñas, desecha lo más posible las varas grandes.
  • Elabora las tortitas, apretándolas bien con las manos para que queden compactas, y en el centro ponles el queso deshebrado. Después pasa las tortitas por harina, sacude el exceso.
  • Prepara los huevos batidos para capear (bate primero las claras a punto de nieve, luego las yemas con sal, y luego mezcla las dos).
  • Fríe las tortitas en el aceite caliente hasta que estén doraditas. Escúrrelas sobre papel absorbente y mételas a la salsa hirviendo durante cinco minutos. Sírvelas bien calientes.
Salsa
  • Quítale las semillas a los chiles guajillo.
  • Pon a asar el ajo, los chiles y los jitomates.
  • Hierve todos los ingredientes y después licúalos, agrega la cebolla y sal al gusto.
  • Antes de poner al fuego la salsa para sazonarla, cuélala para quitar los grumos

Planeta Joy - Comer - Estamos invitados a tomar el té...en dos hoteles

Estamos invitados a tomar el té...en dos hoteles

El Sofitel Arroyo y el de Cardales ofrecen dos opciones elegantes y suculentas para las tardes de otoño e invierno.

Con la llegada de los primeros fríos a Buenos Aires, las salidas se adelantan y la tarde se convierte en un gran momento para encuentros foodies. En este contexto, dos hoteles presentaron interesantes propuestas para este horario. Se trata del Sofitel Arroyo y el de Cardales.

El hotel de Retiro relanzó un plan sólo apto para golosos: su tradicional Festival de Chocolate, que se puede disfrutar todos los sábados de 16 a 18 horas. Ideal para grandes y chicos. Tiene un precio de $480 para adultos y de $400 para menores de 12 años.



¿Qué incluye? Un buffet salado con variedad de sándwiches de pan casero, salmón marinado casero y blinis tibio y una degustación de quesos y fiambres. Además, una mesa dulce con bombones, trufas, madelaine de chocolate y whisky, brocheta frutal bañada en chocolate, macarrones, alfajores, scons de chocolate y naranja, torta opera, torta Sacher, húmedo de chocolate,
barras de chocolate, trío de chocolate, choux, budín de peras y chocolate, muffin de frutos rojos y cobertura de chocolate blanco, cookies ravioles de chocolate, tarteleta frutal, cheesecake de membrillos, trifle selva negra, waffles y crepes. Para tomar, infusiones a elección, chocolate caliente, jugo de pomelo o naranja, aguas, gaseosas y una copa de espumante Trumpeter Extra Brut.

Sofitel Arroyo Buenos Aires está en Arroyo 841, Retiro. Para reservas y más información, llamar al 4131 0130 o enviar un mail a lesud@sofitel.com.

El Sofitel La Reserva Cardales propone un plan para aquellos que quieran alejarse de la ciudad y disfrutar de la naturaleza: el Atardecer en Le Lac. Todos los jueves, de 16 a 18.30 horas, el hotel ofrece un té delicioso.

El té de la tarde se sirve con la mejor pâtisserie francesa que se funciona con la pastelería local a cargo de Romina Rodriguez, Chef Pâtissier y el prestigioso Diego Irato, Chef Ejecutivo. El programa tiene un costo de $660 por persona e incluye una copa de espumante Sweet Bubbles de Nicasia Vineyards.



El hotel está en Ruta Panamericana Nº9, KM 61, Campana. Para reservas y más información, llamar al 03489 435850 o enviar un correo a lelac@sofitel.com.

 Link a la nota: https://www.planetajoy.com/?Estamos_invitados_a_tomar_el_t%E9...en_dos_hoteles&page=ampliada&id=9572